martes, 21 de agosto de 2012

ESPAÑA ESTA EN GUERRA

ESPAÑA ESTA EN GUERRA

España está en guerra por si alguien no se ha dado cuenta. Y está en guerra porque se cumplen los principales factores para que desencadene un conflicto violento. Lo único que falta es esa chispa casual que prenda finalmente el castigado ánimo de la población.

El pueblo, el que supuestamente manda, lleva un par de años practicando el grito sordo, a veces de manera manifiesta, a veces omitiendo la manera, pero siempre con un pensamiento objetivo.

España es un país saturado de problemas, carente de soluciones o lo que es peor, necesitado de Mesías.

Esa España está en guerra.

Un país que, cito a Pedro Ruíz “un día se toma a pecho el asunto más pequeño y que al otro se hace pis en el libro más sagrado”, donde hay un sector territorial que clama por la independencia en un 51% de su población teórica, donde otra cultura milenaria reclama su soberanía después de haber aparcado la lucha armada, este país, ya no es la España de Felipe II.

Una España ganadora en los deportes a la que la mayoría del pueblo no sabemos equiparar con la España Social, la que pide, la que exige a sus políticos que den un golpe sobre la mesa o en su defecto, una buena noticia. Esa España es la que debe ganar su partido.

Una España bipolar, una España extremista, que no entiende de términos medios, que es del Barça o es del Madrid, que es del PSOE o es del PP. La misma España que se mató a si misma en el período de 1936 a 1939. Los unos y los otros, los otros y los unos.

Una España donde hay adineradas diputadas de derechas que jalean cual taberneras, donde hay ministras socialistas que visten de Prada, donde se pagan dinerales por retratos, donde se tiene Rey, donde dicho Rey mete la pata constantemente, donde el yerno de dicho Rey trinca, donde la mujer del yerno de dicho Rey no es imputada aunque sea conocedora del acto.

La España de los Presidentes del Consejo General del Poder Judicial que omiten hablar de sus gastos. La España donde se queman los montes en sitios donde hace falta construír.
La España donde los expresidentes son un problema y cada vez que hablan sube el IVA. La España del euro por receta, de la tapa gratis en algunos bares y en otros no, del recibo de la luz para ricos, de la factura de Internet más alta de Europa. La España de los circuítos de Fórmula 1.

Esa España está en guerra.

No se oyen los disparos, pero se ve la sangre, el hambre, la miseria y el futuro negro, el exilio y la emigración.
No hay muertos por las calles, solo jóvenes preparados si casa ni empleo.
No hay prisioneros de guerra, solo deshauciados de sus casas.
No hay bombardeos, pero si hay impuestos sangrantes que nos empobrecerán aún más.
No hay batallas en el campo de marte, pero hay policías usando su material de trabajo contra la población que decide disparar palabras y consignas.